Ingredientes:
- 1 kg. de rovellones (níscalos)
- 1 pizca de sal
- 2 dientes de ajo
- 1 pizca de guindilla
- 50 cc. de aceite de oliva
- 100 gr. de chorizo curado
- 1 pellizco de pimienta negra molida
- 1 vaso de vino blanco seco
- 1 cucharada de perejil picado
Elaboración:
- Los rovellones se limpiarán cuidadosamente con un cepillito, papel de cocina o un paño hasta que queden perfectamente limpios y se cortarán en trozos regulares.
- En una sartén honda, se freirán los dientes de ajos picados y, antes de que se doren, incorporar el chorizo curado, también picado en trocitos y la guindilla si se quiere que pique un poco.
- Dejar que se haga un poco e incorporar los níscalos, bajando el fuego para que vayan sudando el agua. Salpimentar.
- Cuando se haya evaporado el agua, incorporar el vaso de vino y volver a dejar que se evapore, hasta que quede un caldito espeso de color marrón oscuro que envuelva todo.
- Servir en cazuelitas de barro, espolvoreando por encima el perejil picado.